De acuerdo al último hallazgo de la revista Proceedings of the National Academy of Science (PNAS), nuestro cerebro no funciona de forma jerarquizada como se pensaba desde antaño sino que, por el contrario, viene a derribar esta teoría y establece que sus interconexiones son parecidas a una gran red como Internet.
Como informó Prensa Latina, los investigadores de la Universidad de California estudiaron a un grupo de ratas y les aislaron una pequeña parte de su cerebro ubicada en el núcleo accumbes -vinculado con la recompensa y el placer-.
Luego, inyectaron ciertos localizadores -moléculas que iluminan e identifican las señales cerebrales a lo largo del tejido sin obstaculizar su movimiento- e introdujeron en el cerebro de las ratitas dos marcadores: uno para mostrar hacia dónde viajaban estas señales y otro para determinar dónde se gestaban; proceso gracias al cual identificaron 4 niveles de conexión.
¿Qué descubrieron los expertos luego de tener los datos? Se detectaron ciertas curvas y serpenteos entre las diferentes zonas cerebrales que, hasta el momento, no se sabía que tenían comunicación entre sí. Si bien hace tiempo se formuló una estructura cerebral con estas catacterísticas -altamente relacionada-, no se había demostrado de forma experimental sino hasta ahora.
De este modo, se postuló que nuestro cerebro funciona como una red interconectada de “cables” muy parecido a como lo hace Internet -de forma no lineal- y distinto a lo pensado, es decir, que aquellas jerarquizaciones determinaban qué datos eran más importante que otros a la hora de procesar información.
No hay comentarios:
Publicar un comentario