El australiano David Warren fue quien desarrolló la idea de registrar las voces de los pilotos y la actividad de los instrumentos en la cabina de mando de los aviones después de investigar el accidente de un Comet, el primer avión comercial a reacción, en 1953
En un principio, el Departamento de Aviación Civil de Australia despreció el invento de Warren considerándola como un invento inútil.
Recién en 1958, después de que un funcionario aeronáutico británico viera el dispositivo, Warren recibió el dinero necesario para la fabricación comercial del nuevo invento.
Actualmente, la "caja negra" es un equipo indispensable en la mayoría de los aviones y Australia se convirtió en 1960 en el primer país en hacer obligatoria su instalación en los aviones de todas las compañías aéreas según informa el diario Ámbito Financiero.
Warren, considerado uno de los científicos australianos más brillantes, fue condecorado en 2002 con la Orden de Australia, la mayor distinción civil en su país, y la aerolínea australiana Qantas bautizó un Airbus A380 con su nombre en 2008.
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